Un joven de 18 años fallecía el jueves tras ser apuñalado por otro de 17 mientras ambos asistían a un curso de concienciación sobre el peligro de los cuchillos y el crimen en un centro social al oeste de Londres.

Además, otro joven que intentó mediar entre agresor y víctima fue también apuñalado, pero su vida no corre peligro tal y como confirmó la Metropolitan Police londinense a través de un comunicado.
La policía no ha confirmado más detalles sobre el suceso pero, pero varios medios locales británicos apuntaron que agresor y víctima ya se conocían, citando fuentes policiales.
El ataque, tal y como se observa en las fotografías que han difundido los medios británicos, se produjo en el interior de las instalaciones en lo que parece ser un aula.

Armas blancas: un  grave problema
En Inglaterra y Gales, los denominados knife crimes (delitos cometidos con la mediación de "un cuchillo o un objeto afilado") ascendieron a 44.000 hasta entre octubre del año pasado y este. Al final del ejercicio pasado, un total de 285 personas murieron a causa de apuñalamientos, un máximo que no se daba desde 1946.
Debido al enorme repunte en este tipo de delitos, cuyos autores suelen ser jóvenes, en todo el país se llevan a cabo numerosas actividades y cursos para concienciar sobre el peligro que implican los cuchillos.