Un santiagueño que había estado preso por violencia de género le dijo a sus hijas que iba a matar a su ex pareja. Una de ellas llamó a su mamá, quien dio a aviso a la Policía al ver al hombre tirándole piedras a su casa. El agresor terminó otra vez detenido.

La desesperación fue instantánea. Apenas escuchó la frase, llamó a su madre y la alertó sobre lo que había ocurrido y sobre lo que, si se cumplía el vaticinio, estaba por pasar.

"Ya vengo, voy a comprar nafta para prenderlo fuego a tu madre", soltó el hombre antes de salir del hogar santiagueño en donde viven sus hijas. El aviso de la adolescente a su mamá y la posterior denuncia de la mujer de 39 años a la Policía evitó la tragedia porque un rato después el sujeto que había proferido la amenaza terminó detenido en las inmediaciones de la casa de su ex.

Según dio a conocer El Liberal, hace un año y medio que la pareja no convive. Lapso en el cual el involucrado estuvo detenido tras distintas presentaciones penales por violencia de género. Al recuperar su libertad, en varias oportunidades se lo vio en la casa de sus hijas, a quienes les solía manifestar que "mataría a su madre" porque por estar preso "perdió todo lo que tenía".

La última amenaza tuvo lugar el martes. Primero a través del relato que la chica de 21 años le había contado a su madre por teléfono y luego, ya de noche, en forma presencial.

De acuerdo con el testimonio de la víctima, alrededor de las 22.30 notó que el acusado andaba merodeando su vivienda, ubicada en la ciudad de Santiago del Estero. Por miedo a que ingresara, cerró todas las puertas y ventanas. Al no poder entrar, el hombre empezó a tirar ladrillos al techo, mientras le exigía que saliera de la propiedad.

Tras un llamado a la Policía, efectivos llegaron al lugar y, por orden de María del Pilar Gallo, fiscal de la Unidad de Violencia de Género, se dispuso la inmediata aprehensión del acusado.