Un juez determinó que como los destinatarios creían que el pago era "de buena fe y con amplia justificación" tienen derecho a quedarse con el dinero.

El Citibank transfirió 500 millones de dólares por equivocación y el fallo de un juez determinó que no podrá recuperar el dinero. La maniobra es considerada uno de los mayores errores de la historia bancaria.

El caso se inició en agosto de 2020 cuando el banco perteneciente a Citigroup envió por transferencia 500 millones de dólares a más de diez empresas financieras que eran parte de un préstamo a plazos para la compañía de cosméticos Revlon.

El monto enviado debía corresponder solo a los intereses (unos 8 millones) pero, en cambio, el Citibank transfirió la totalidad del capital, suma que asciende a 893 millones de dólares.

Si bien la entidad reconoció rápidamente el error, y algunos prestamistas accedieron a devolver el dinero, otros diez se negaron al considerar que se trataba de un pago anticipado. Ahora, el fallo de un juez determinó que el banco no podrá recuperar la plata enviada.

“Es un error bancario sin precedentes”, señaló el juez Jesse Furman en Manhattan. El magistrado resolvió que las transferencias realizadas el 11 de agosto de 2020 eran “transacciones finales y completas, no sujetas a revocación”.

Para el juez “los prestamistas creían, y estaban justificados al creer, que los pagos eran intencionales” porque “creer que Citibank, una de las instituciones financieras más sofisticadas del mundo, había cometido un error que nunca antes había ocurrido, por una suma de casi mil millones de dólares, habría sido casi irracional”.

Desde el Citibank apelarán al fallo del juez y a través de un comunicado la compañía afirmó: “Creemos que tenemos derecho a los fondos y continuaremos buscando una recuperación completa de ellos”.

Sostienen que los prestamistas de Revlon sabían o deberían haber sabido que la transferencia bancaria se trataba de un error y que no correspondía un pago de dicho monto.