Otro joven de 19 años resultó herido de gravedad. Solo habían vendido seis entradas para esa función pero todavía no logran dar con el presunto culpable ni con el arma homicida.

En los últimos minutos de este lunes, empleados de un cine ubicado en un shopping de California, Estados Unidos, se encontraron con una escena de horror cuando ingresaron a una de las salas. Es que entre las butacas hallaron a una adolescente asesinada de un disparo y a un joven gravemente herido.

Todo ocurrió en el Edwards Theatre, un centro comercial de la localidad estadounidense de Corona. Alrededor de las 11:45 pm, la policía recibió el pedido de ayuda luego de que descubrieran a la chica con un disparo mortal. Los trabajadores habían entrado al lugar, como era costumbre, para limpiar después de la proyección de la película, confirmaron desde el Departamento de Policía de Corona.

Por su parte, desde la empresa del cine, emitieron un comunicado en el que aseguraron que: "Nuestra principal preocupación es la seguridad de nuestros huéspedes y personal".

La joven fallecida fue identificada como Rylee Goodrich, de 18 años, y fue declarada muerta en el lugar, mientras que el herido, Anthony Barajas, de 19, fue trasladado a un hospital en grave estado. Actualmente está con soporte vital, confirmó el oficial Tobias Kouroubacalis.

Qué pasó adentro de la sala de cine en Corona
Paradójicamente, ambas víctimas habían ido juntas para ver “The Forever Purge”, que es la última entrega de la saga conocida en español como “La Purga”. Estas películas pertenecen al género terror y plantean un futuro distópico en el que las autoridades permiten durante 12 horas al año que cualquier persona cometa toda clase de delitos sin enfrentar luego ningún tipo de castigo. Obviamente, dentro de los crímenes permitidos está el asesinato a sangre fría, como el que ocurrió con estos jóvenes.

Para esa función, que era la última del día, vendieron solo seis entradas, pero la policía no ha podido dar hasta el momento con las otras cuatro personas que deberían haber asistido a la proyección. Por ende, tampoco tienen en claro el horario en el que se produjeron los disparos, y tienen que llenar los espacios en blanco en un periodo de dos horas, desde que comenzó la película, hasta que entraron a limpiar y los encontraron.

"No sabemos qué pasó exactamente allí. Estamos en un proceso paso a paso, revisando cada asiento, revisando cada parte de esa sala de cine para encontrar cualquier tipo de evidencia que tengamos y también pidiendo la ayuda del público al mismo tiempo", sentenció el oficial de policía.