Hermano del expresidente declaró como propio en 2016 un "trust" que alcanzarĂa los u$s 25 millones. Su verdadera titular era Alicia Blanco Villegas que en 2020 lo re introdujo en su patrimonio. La Ley de blanqueo expresamente impedĂa que accediera al beneficio. La nueva prueba da un giro a la causa judicial.
Siempre se sospechó que existieron maniobras ilegales ligadas al blanqueo de capitales que impulsó el gobierno de Mauricio Macri y que habĂan tenido como beneficiarios directos a la propia familia del expresidente. Pero nunca se habĂan podido comprobar, de manera fehaciente, pese a las múltiples investigaciones abiertas desde los Panamá Papers. Hasta ahora.
Gianfranco Macri –hermano del exmandatario- fraguó los requisitos contenidos en la ley de exteriorización sancionada por el Congreso, en 2016, para declarar como propio un “trust”, equivalente a un fideicomiso, radicado en Liechtenstein que, en realidad, pertenecĂa a Alicia Blanco Villegas, madre de ambos e impedida legalmente para acceder a los beneficios que otorgaba la amnistĂa fiscal. En exclusiva, a los documentos de conformación de ese trust que la tienen como primera beneficiaria y a información contenida en una causa judicial que tramita en el fuero penal económico, donde se incorporó esa evidencia como prueba nueva de hechos ilĂcitos, donde el hermano del expresidente está imputado. Según los investigadores, el monto blanqueado estarĂa en torno a los u$s 25 millones, casi el 60% del volumen de dinero que Gianfranco admitió como propio en las presentaciones que hizo ante el fisco para acogerse al blanqueo.
Quiñel Trust es el nombre del fideicomiso que fue creado el 29 de noviembre de 2000, de acuerdo a las leyes del Principado de Liechtenstein, considerado un paraĂso fiscal de solo 160 kilómetros cuadrados, ubicado entre Austria y Suiza. Quiñel posee el 100% de las acciones de Reata Pacific Ltd, BVI, que a su vez era titular de dos cuentas bancarias. Los derechos del fiduciante estaban administrados por el Credit Suisse Trust AG, en nombre de Alicia Beatriz Blanco Villegas, con quien figura un contrato firmado. La primera esposa de Franco Macri es la madre de Mauricio, Gianfranco y Mariano (además de Sandra, ya fallecida), y según su estatuto, la principal beneficiaria de los fondos y las rentas del mismo.
Pero no fue ella quien lo declaró, sino que lo hizo uno de los denominados “segundos beneficiarios”, que de acuerdo al reglamento, solo podrĂa actuar en nombre de su madre en caso de fallecimiento o incapacidad definitiva constatada. Nada de eso ocurrió, sino que se utilizó un artilugio para que a través de una persona interpuesta, esos activos no declarados pudieran ingresar al patrimonio de los involucrados, sin levantar sospechas.
De acuerdo a la documentación obrante en Liechtenstein, Blanco Villegas era la única e ilimitada beneficiaria del Trust, y en caso de su muerte, un 70% correspondĂa a sus hijos, mientras que el 30% restante se repartirĂa entre sus nietos. Pero el dato saliente es que la propia Blanco Villegas lo terminó reconociendo, al explicar que cuando su hijo Gianfranco mudó su domicilio fiscal a Uruguay –para evitar ser alcanzado por la AFIP cuando su hermano dejó la presidencia- ella poseĂa la administración y control de los activos del Trust, los que fueron incorporados a su declaración de Ganancias y de Bienes Personales. Pero su incorporación, fue recién en 2020, tres años después de que Gianfranco los ingresara al blanqueo de la Ley N° 27.260 como propios. La mujer, adujo que simplemente se trató de un “cambio” de contribuyente. Las autoridades solicitaron a Gianfranco que explique también por qué incluyó esas cuentas bancarias en la exteriorización que hizo, amparado por la norma. TodavĂa no respondió.

Impedida
El problema central que explica la maniobra se encuentra en el ArtĂculo 83 de la Ley que contenĂa la Reparación Histórica para jubilados. Quedaban expresamente excluidos de los beneficios los “cónyuges, los padres y los hijos menores emancipados” de los funcionarios. Blanco Villegas es la madre del entonces Presidente que impulsó el blanqueo. Pero Gianfranco nunca pudo haber perfeccionado esa exteriorización de Quiñel Trust porque la propia ley especificaba que solo se podĂa declarar ante la AFIP las tenencias de moneda y bienes que figuraran como pertenecientes a las sociedades, fideicomisos en el exterior
“cuya titularidad o beneficio les correspondiera al 31 de diciembre de 2015, inclusive”. La operatoria tampoco encontraba justificación en el decreto con el que Macri trató de atemperar el ingreso de familiares al blanqueo.
AsĂ planteado, la justicia investiga ahora si con estos hallazgos, Gianfranco Macri habrĂa blanqueado cuentas en el exterior, de un fideicomiso del cual Blanco Villegas era titular beneficiaria, que por ser la madre de Mauricio Macri se encontraba impedida de acceder al régimen de exteriorización. Cuando Gianfranco abandonó la residencia fiscal argentina, los activos volvieron a ser declarados en el patrimonio de la madre del expresidente. Un escándalo que puede dar un giro a un expediente que venĂa aletargado desde que el nombre Macri irrumpió en Panamá Papers y parte de las pruebas de dinero no declarado y la creación de un entramado offshore con el cual el clan operaban sus negocios fue intentado cargar a la cuenta de un ya convaleciente Franco Macri.
Causas
Esta información que revela Ámbito, se incorporó a un desprendimiento de la causa de Panamá Papers, a cargo del juez Diego Amarante. El descubrimiento de esta maniobra pone en crisis un intento de sobreseimiento prematuro que habĂa sido intentado por el fiscal subrogante Germán Bincaz, que sostenĂa la extinción de la acción penal porque la AFIP habĂa validado, a través de las formalidades de rigor, el ingreso el 23 de diciembre de 2016 de Gianfranco Macri al sinceramiento fiscal en los términos de la Ley 27.260. Por esto, habĂa dictaminado por el sobreseimiento de los imputados, sobre los que pesaba la sospecha de no ser los titulares de las empresas que habĂan sido “
blanqueadas”. La sociedad bajo sospecha ante infracciones a la Ley Penal Tributaria era BF Corporation SA, con activos en el Banco Safra de Suiza. Tanto Gianfranco como su herman Mariano estaban investigados por evasión fiscal a partir de la radicación de empresas off shore en extrañas jurisdicciones con sistemas de intercambio de información restrictivos. Por todos los medios, el hermano del expresidente habĂa intentado clausurar la pesquisa.
En hechos que eran conocidos, no solo BF estaba en la mira, sino EQT SA, radicada en Uruguay. Para el fiscal Bincaz no está corroborado que ambas compañĂas operaran para SOCMA bajo el control de Franco Macri, quien a 2012 habĂa cedido el paquete accionario de la controlante y la cuenta bancaria sospechosa abierta en Alemania fines de ese año con transferencias al banco suizo en 2015. Lo que subyace es que tampoco aquĂ se conoce la titularidad real de los activos bajo investigación. En octubre de 2020, Amarante habĂa ordenado examinar las titularidades del patrimonio para saber si habĂa correspondencia con quienes lo blanquearon. Hubo expresas sospechas en la justicia de la manipulación de las titularidades.
La causa judicial se originó a partir de la denuncia de la ProcuradurĂa de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), y hubo información aportada por la fiscalĂa de Hamburgo al Ministerio Público Fiscal de Argentina por operaciones sospechosas relativas a BF Corporation. La investigación disparó pedidos de información a Panamá, Suiza, Islas VĂrgenes Británicas y también a Liechtenstein.
Quiñel Trust no es lo único que ha llamado la atención a los investigadores. Gianfranco Macri incluyó en el blanqueo a la firma Wanama Capital Inc. En el formulario habrĂa consignado que contaba con el consentimiento de Franco. Otra sospecha más de que podrĂa haber intentado blanquear una sociedad que pertenecĂa a su padre, impedido por su relación con el entonces presidente Mauricio Macri. Todos estos datos eran, hasta hoy, desconocidos.
FUENTE :
AMBITO