El insólito acontecimiento ocurrió en una estancia ubicada en la ciudad santafesina de Sastre, donde una vaca dio a luz a la extraña criatura de ocho patas que nació sin vida.

Un insólito episodio ocurrió en una estancia ubicada al norte de la ciudad santafesina de Sastre: una vaca dio a luz a un ternero muerto con dos cuerpos. El extraño animal tenía ocho patas y ambos torsos estaban unidos en el tronco a la altura de la cintura escapular.
El médico veterinario Andrés Calcaterra fue uno de los primeros en observar el fenómeno cuando acudió ante el llamado del dueño del campo para atender a una vaca de raza Aberdeen Angus que no podía parir.
“Cuando empecé a revisarla, me di cuenta que venían cuatro patas para atrás. Pensé que eran dos fetos que venían de cola y cuando quería sacar uno se venían las cuatro patas, por lo que decidí sacarlo por cesárea ya que estaban muertos y por el tamaño no iban a salir”, explicó el joven veterinario en diálogo sitio informativo local.
“Era un animal con una cabeza, dos cuerpos unidos a la altura de la cintura escapular y ocho patas”, describió ante el asombro del dueño del campo y los trabajadores de lugar.
“Este tipo de nacimientos con deformaciones se da en un 0.05% de los casos, que es más o menos lo que veo en estos cinco años que llevo trabajando como veterinario”, agregó.
Respecto a las posibles causas del fenómeno, Calcaterra explicó que se trata de “malformaciones congénitas que se dan en muchos casos en la fase temprana de gestación dentro de los 45 días. Hay un factor que influye sobre el embrión, que pueden ser genéticas o externas y hasta un estrés calórico puede genera una alteración congénita”.
“No hay certezas porqué se desarrolló, pero hay estudios sobre un virus de la diarrea viral bovina, que genera malformaciones congénitas y es el más común de los casos. Está comprobado que, dependiendo del tipo de cepas, el virus afecta justo en la fase embrionaria de la gestación generando malformaciones”, amplió el veterinario en comunicación con el sitio InfoSastre. Y agregó: “Este virus está siendo tratado en el mundo pero es muy difícil de inmunizar a los animales”.
Según el veterinario, la vaca de 6 años, que iba por su tercera cría, mostraba un estado de cansancio importante tras hacer fuerza durante horas para parir, pero se está recuperando bien.