"Estúpidos enfermos que le hicieron esto a mi pequeña. Pero gracias a Dios ya está conmigo", escribió la dueña en las redes sociales. El aberrante hecho ocurrió en México.

Una mujer amante de los perros y activista mexicana que trabaja por los derechos de los animales, días atrás se mostró desesperada cuando dos hombres secuestraron a su perra Lyla. Poco después apareció, pero la felicidad por el reencuentro duró poco ya que luego descubrió que los delincuentes habían violado a su can.
                                                                                                                                                                                                                       
Fue el miércoles pasado cuando Francisca Navarro expresó en Facebook su preocupación por el paradero de la mascota. "Recibí una noticia muy triste. Se robaron a mi preciosa Lyla del Parque Industrial, un guardia vio como dos hombres la levantaban y se la llevaban. Con razón yo iba y la buscaba y nada, pero creí que andaría por ahí", escribió.

"Sabemos bien que hay gente mala, que se los lleva para hacerles daño o ignorantemente no los cuidan bien. Mi Lyla vivió desde cachorra en el Parque Industrial, sabe muy bien vivir ahí, tiene alrededor de siete años de edad, está esterilizada desde pequeña", agregó.

Semanas más tarde la perra volvió a parecer en el parque, ubicado en Hermosillo, México, pero Francisca notó que ya no era la misma. La mascota tenía dificultades para caminar y se comportaba de una forma poco habitual.

La llevó a la veterinaria para que la revisaran, y fue allí donde le dieron la noticia. "La doctora ya lo confirmó, mi Lyla fue violada, trae desgarradas las paredes vaginales y muy inflamada la vulva", reveló. Y luego, enfatizó: "Para aquellos que creen que en Hermosillo no pasan estas cosas, lamento informarles que sí pasan y esta vez le tocó a mi preciosa bebé. Ya fue medicada para el dolor, inflamación y para la Infección que trae. Estúpidos enfermos que le hicieron esto a mi pequeña. Pero gracias a Dios ya está conmigo".



Luego del ataque que sufrió la perra, la activista agradeció que la perra esté a salvo con ella e hizo una denuncia para tratar de que identifiquen y castiguen a los responsables del abuso sexual a su mascota.